La Curia Episcopal de Rionegro, reinició sus labores pastorales

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dioc-iniciocuria2018Este lunes 15 de enero, con una Eucaristía presidida por Monseñor Fidel León Cadavid M, obispo diocesano, se dio inicio a las labores de la curia Episcopal para el año 2018. En la celebración, realizada en la capilla de las hermanas Filipenses, el obispo dio algunas pautas en su homilía, respecto a lo que significa trabajar en la curia, como seguidores y discípulos de Jesús, partiendo de la palabra, para entender cómo se vive la vida cristiana, y cómo debemos vivir nosotros. En el Evangelio de hoy el ayuno es lo que usa el Señor para exponer su mensaje.

“Los discípulos de Jesús no ayunan, por algo distinto; el Señor está poniendo unos cimientos nuevos y por ello sus discípulos tienen que marcar una novedad. Nosotros somos discípulos de Jesús. El pensamiento de Jesús, en muchos elementos de la tradición del pueblo de Israel, marca unas pautas nuevas. No negaba las cosas, pero nunca se los impuso a los apóstoles como algo obligatorio. Jesús va en contra de esa manera estricta de vivir la ley, aquellas prácticas que en lugar de acercarlos a Dios, los alejaba” indicaba monseñor en su Homilía.

En su reflexión, el obispo también insistía en la necesidad de cambiar las estructuras, puesto que lo nuevo no cabe en lo viejo. El reino de Dios que propone no es cuestión de remiendos en las escrituras judías, no son añadiduras, porque remendar es más costoso y maluco que cosas nuevas.

La vida cristiana es una fiesta. Jesús tiene una relación tan fuerte, libre y alegre con Dios, que es lo que debe implicar la vida, una fiesta. Una relación que libere, que parta de la libertad interior, que no esclavice, que no encierre, eso es lo que Jesús quiere traer. Jesús no viene a predicar tristeza, viene a invitar a la alegría del reino.

“Si nuestra vida de fe es una cosa pesada que en lugar de elevarnos nos aplasta, no es una vida realmente Cristiana. La vida dentro de la iglesia es alegría, es de compartir, que seamos capaces de encontrar la novedad. Eso es lo que implica la renovación, mirar qué hay caduco, qué ya no funciona, vencer el miedo a no hacer cosas distintas”.

En nuestro trabajo debemos aplicar esa novedad, insistía el obispo. Además, recordó el encuentro que tuvo el Papa Francisco con el personal que trabaja en la Curia Vaticana, donde les habló de cuatro elementos esenciales. En primer lugar, agradecer, y les decía que sin su trabajo, el de la iglesia no es posible: la Evangelización. Recordaba el obispo que el papa decía que el trabajo debe favorecer la santidad en cada uno, la alegría y el crecimiento. En un segundo elemento, la Familia, porque hay que defender la familia, puesto que es una joya preciosa y hay que protegerla. El bienestar familiar es parte del crecimiento de cada uno. En tercer lugar, atacar los chismes. Recordaba que el papa decía que chismosear es terrorismo, porque crea divisiones y eso hace mucho mal entre todos. Y por último y no menos importante, el Perdón; porque reconoce que entre los mismos sacerdotes hay momentos en que no se genera un buen trato y que es necesario pedir perdón por todo eso.

Para terminar, el obispo recalcó tres elementos importantes que se deben tratar de forma decidida en la diócesis

  1. Trabajo de orquesta. El trabajo de cada uno tiene que ser en relación con el del otro, armónico, un trabajo de todos.
  2. Comunicación estratégica. Porque se hace necesario escucharnos, conversar, hablar. Una institución crece y va adelante cuando los miembros conversan, hablan. De ahí que el hecho de esa nueva visión estratégica de la curia es para poder favorecer esos espacios de encuentro y conversación. Una institución es lo que conversa, es lo que queda y de lo que se sale adelante.
  3. El valor de la persona. El alma de toda organización es la persona, los que la integran, que cada uno se sienta bien, que todos tengan la oportunidad de crecer y ser valorados. Tener en cuenta a todos. Ese aspecto humano es algo que se necesita seguir fortaleciendo.

Al final, invitó con alegría y entusiasmo a vivir este año y hacer bien el trabajo, permitir que se fortalezcan las cosas. “La curia es un acompañamiento a todos los sacerdotes que están en su lucha diaria con las comunidades y las instituciones. Que podamos ayudar y aportar para el buen trabajo de la iglesia, que es la Evangelización”, finalizó.

Sacerdotes Curia 2018En la Eucaristía, también se realizó la bienvenida a los nuevos sacerdotes que llegan a acompañar el trabajo pastoral de la Diócesis, en la curia Episcopal, José Saúl Grisales, como vicario General, Edwar Moreno y Fernando Monsalve, para las áreas de Evangelización y Comunión, respectivamente.

Ponemos en manos del Señor este nuevo año de trabajo en la curia Episcopal de la Diócesis de Sonsón Rionegro. Les pedimos a todos que oren por nosotros y cuenten con nuestras oraciones, para que el Creador nos llene de energías y fortaleza para seguir acompañando a las comunidades de nuestro territorio eclesial, en ese camino a la Salvación, con el Evangelio, Fuerza de Dios.

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